Con una superficie construida de 847 metros cuadrados, el proyecto forma parte de una serie de encargos para realizar edificios en altura de renta de uso turístico y mixto en la ciudad de Rosario, en la provincia argentina de Santa Fe. Los promotores de estos proyectos pertenecen a la industria del acero, comercializan perfiles metálicos y tubos de acero, lo cual establece una constricción inicial en el uso de recursos materiales y tecnológicos, que el estudio liderado por Federico Marinaro transformó en una oportunidad para el desarrollo del Edificio 01.

Se plantean cuatro referencias: un cierto aspecto de la arquitectura industrial del siglo XX; Venturi y Scott Brown en Learning Las Vegas; Atelier Bow-Wow en Made In Tokyo; y Enrique Walker Lo Ordinario. Cuatro referencias que son distintas entre sí, pero que comparten cuestiones fundamentales: operan de abajo arriba, trabajan con la realidad, son pragmáticas y ajenas a los modelos abstractos. Son un sistema que permiten operar en los márgenes de la disciplina. Las cuatro aproximaciones convergen en el Edificio 01 que se produce como resultado del aprovechamiento y manipulación estratégica de los medios productivos y de la realidad, y no de un programa estético, o por aplicación de un método. La obra intenta moverse en esta línea fina entre lo ordinario y lo extraordinario de la arquitectura.

(Extracto de la memoria del estudio Federico Marinaro)