El campus de la Universidad de Columbia está situado en Morningside Heights, junto a Harlem. Se trata de un lugar muy simbólico en Nueva York que se encuentra actualmente en proceso de renovación cultural y social después de un largo paréntesis de crimen y violencia. Para la universidad, ésta es la ocasión perfecta para repensar su papel y abrir su campus a la ciudad mediante teatros, bibliotecas, estudios de grabación y galerías de arte.

El primer acercamiento no se hace desde el planeamiento, sino desde la topografía y la sociología: se estudia su historia, se mantiene lo existente y se metaboliza. La parcela se extiende de la calle 125 a la 133, y de Broadway al este hasta la Riverside Drive al oeste. Su presencia es muy potente e influirá en el carácter de los nuevos edificios.

La primera fase abarca la construcción de cuatro edificios académicos, la School of Art entre ellos. Todos estos edificios se abren al ‘Common’, una gran plaza pública y versátil que funciona como lugar de encuentro y descanso. En la planta baja de cada edificio se organizan funciones públicas permeables y accesibles. Los espacios académicos y oficinas se sitúan por encima de este nivel, mientras que los laboratorios y los servicios técnicos se excavan en el terreno.