Se aprende de los errores, afirman Carlo Baumschlager y Dietmar Eberle, y nosotros hemos tenido oportunidad de equivocarnos muchas veces. La verdad es que en este catálogo de viviendas se recogen sólo los aciertos de los arquitectos austriacos, pero su actitud abierta y resolutiva es la que les ha permitido considerar cada encargo doméstico como un reto, y acumular una experiencia que, expuesta aquí de forma sistemática, resulta muy útil a modo de decálogo para el juego serio del proyecto residencial.
Habituados a trabajar en un medio muy determinado por la tradición y el paisaje, lo primero que preocupa al estudio de Vorarlberg es la cuestión de las transferencias entre lo internacional y lo local: ¿qué clases de construcciones pueden realizarse sobre unas bases transregionales? La casa compacta, los edificios funcionalmente mixtos, las tipologías aditivas o las servidumbres del entorno urbano son algunos de los aspectos analizados desde la propia práctica, sin olvidar otros que suelen pasarse por alto, como la economía o la aceptación social. A pesar de que la delicadeza material y formal de algunas de sus obras las haga parecer esculturas habitadas, Baumschlager y Eberle saben que la arquitectura está sujeta a reglas diferentes que el resto de las artes.