
Dos décadas después de su primera colaboración, Louis Vuitton y el artista Takashi Murakami se han unido de nuevo en el diseño de una pop-up, inspirada en los hoteles cápsula modulares de Tokio, que ha podido visitarse en el SoHo neoyorquino. El interior estaba compuesto por una sucesión de cubículos de vibrantes colores al estilo del japonés, cosidos por un pulido pasillo central. Además de un punto de venta de la colección reeditada, una cafetería o exposiciones con material exclusivo de la firma de moda francesa, durante el mes de enero se han organizado actividades como la restauración de piezas de la colección original de 2003, o la proyección de versiones remasterizadas de varias películas de Murakami en las que aparecen algunos de sus personajes emblemáticos como Panda, Flower Hat Man y Onion Head.