Ya desde el siglo XVIII, una esfera de actuación pública y otra privada quedaron establecidas en la actividad del arquitecto. Un «proyecto doméstico», regulador de los espacios de la intimidad, empezó a tomar forma; pero la subordinación de lo privado a lo público dominó todo el pensamiento ilustrado. Georges Teyssot parte de la idea de la arquitectura como expresión de un orden para tratar de disolver la rígida oposición clásica y mostrar de qué forma esta disolución afecta al ámbito de lo privado.
Una reflexión sobre la cultura de la casa del hombre occidental podría comenzar con la casa de Adán en el Paraíso, si no fuera porque Adán no sólo no tenía ninguna casa en el Paraíso, sino que ni siquiera sentía la necesidad de tenerla. La necesidad de un refugio llegó sólo con el pecado y la expulsión de dicho Paraíso Terrenal. Del mismo modo, se podrían buscar los orígenes y los arquetipos en la arquitectura primitiva, rural o vernácula, pero, aunque estas formas y modelos de organización sean la base de nuestro inconsciente colectivo, los estilos de vida aceptados hoy por la cultura occidental se pueden analizar y describir mejor si partimos de finales del siglo XVII y llegamos hasta nuestros días... [+]