Antonio Lamela
1926-2017
El 1 de abril falleció en Madrid Antonio Lamela, uno de los últimos maestros de la modernidad española. Titulado en 1954 por la ETSAM, el hijo de un promotor y constructor inmobiliario orientó su inteligencia práctica a la creación de un modelo de estudio por entonces inexistente en nuestro país, donde la búsqueda de la rentabilidad a través de grandes promociones se conjugó con el rigor de diseño y la exploración de tipos inéditos. Lamela fue, en este sentido, el primer arquitecto en España en incorporar el aire acondicionado a un edificio de viviendas, el primero en proyectar un supermercado, el primero en implantar el modelo de la ‘oficina paisaje’, el primero en diseñar un motel de carretera, el primero en ofrecer los servicios de gestión de proyectos (project management) y, sin duda, el primero en tener un gran estudio inspirado en las consultorías estadounidenses. Autor de un puñado de obras indiscutibles en la década de 1950 y 1960, y de un parque de edificios inmenso y de muy variada condición, Lamela fue al cabo el artífice de una serie de obras —desde el Hotel Meliá hasta la Terminal 4, pasando por las Torres de Colón— que ayudaron a conformar la imagen de Madrid a través de una modernidad visionaria y a un tiempo corporativa.