Herederos de la tradición barcelonesa, el trabajo de Arquitectura-G destaca por la síntesis formal, la precisión material y la claridad compositiva.
1. Dos apartamentos y una silla
El Apartamento en el Born (2010), la primera obra que descubrimos de Arquitectura-G, nos recordaba en cierta forma al trabajo de Sou Fujimoto. Se trata de un pequeño espacio con una escalera, con escalones-mueble y medios niveles, que remitían a los dibujos conceptuales de las primeras páginas de una monografía dedicada al arquitecto japonés recién publicada entonces. Una vivienda pulcra y bien diseñada, en blanco y madera contrachapada. Lo más diferencial, los medios niveles, a pesar de que en el más alto resultaba casi imposible levantarse, era una cama pegada al techo… o no exactamente. Hablando con más precisión, era un espacio para dormir. Los ‘G’ diseñan ‘espacios-para’...[+]