Hotel Silken Puerta América, Madrid

Hotel Silken Puerta América, Madrid


La cultura mediática actual ha creado una fórmula casi siempre infalible: la reunión de estrellas es sinónimo de éxito. Los directivos de la cadena hotelera Silken, no ajenos a este hecho, reunieron a diecinueve estudios de arquitectura, diseño y paisajismo de trece países para proyectar los interiores, la fachada y el jardín de su nuevo Hotel Puerta América.

Cada planta fue asignada a un estudio invitado, concediendo 1.800 metros cuadrados en los que trabajar con libertad. Los proyectos variaron desde los más atrevidos, a la búsqueda de nuevas sensaciones, hasta los más preciosistas, cuyo objetivo principal es la invitación al descanso. Dentro de la primera línea más experimental se encuentra Teresa Sapey, que llena de color el aparcamiento, sacando brillo a un espacio generalmente desatendido; Ron Arad, que organiza la habitación en torno a una pieza central de formas sinuosas; Richard Gluckman, que en su proyeto de una caja dentro de otra utiliza de modo poco convencional materiales como aluminio, plástico y vidrio; Kathryn Findlay, que gracias a una instalación de luz interactúa con los huéspedes; y los dos más arriesgados, Zaha Hadid y Plasma Studio, quienes con líneas curvas en el primer caso y geométricas en el segundo desarrollan sugerentes espacios continuos y fluidos. Entre los que buscan placeres sensoriales que proporcionen confort y relajación se encuentra John Pawson en su proyecto para la recepción y los salones; Norman Foster, que crea un santuario urbano con la paleta de materiales de la obra de su amigo Eduardo Chillida; David Chipperfield, quien, enamorado del lujo, reviste las superficies con terciope-los y mármoles; y Arata Isozaki, más introspectivo, usa elementos que remiten al mundo japonés. El reposo se traduce en comodidad en las plantas de Victorio y Lucchino, Javier Mariscal y Fernando Salas, y en la de Marc Newson. Por último, el descanso se torna sensualidad en las doce suites de Nouvel, donde se utilizan paredes y paneles deslizantes para exponer la obra de dos fotógrafos: Nobuyoshi Araki, quien juega con imágenes sugerentes del cuerpo humano, y Roland Fleischer, con fotografías abstractas que remiten a la naturaleza. El arquitecto francés también fue el encargado de proyectar el ático, donde se sitúan una piscina, un bar y una terraza con vistas a la ciudad, pero sin duda su intervención más visible es el diseño de la fachada. Con el objetivo de diferenciar el edificio de los bloques de oficinas vecinos se desarrolló un revestimiento de lonas de colores brillantes sobre las que se imprimió, en varios idiomas y en unas enormes letras, un poema de Paul Éluard acerca del poder de la palabra libertad... [+]


Obra

Hotel Silken Puerta América.

Cliente

Grupo Silken.

Autores

Nouvel (fachada, planta 12 y ático); Mariscal y Salas (planta 11); Isozaki (planta 10); Gluckman (planta 9); Findlay (planta 8); Arad (planta 7); Newson (planta 6 y bar); Victorio y Lucchino (planta 5); Plasma Studio (planta 4); Chipperfield (planta 3); Foster (planta 2); Hadid (planta 1); Liagre (restaurante); Pawson Bourne + Bell (jardín); Sapey (garaje). 

Consultores

SGA (estructura); Arnold Chan/Isometrix (iluminación).

Contratista

Ferrovial.

Fotos

R. Vargas; L. Boegly; A.L. Baltanás y P. Orcajo.