El río Guadiana separa, pero a la vez une Portugal y España a lo largo de más de 60 kilómetros desde la desembocadura del río Caia hasta la ribera de Cuncos. Al otro lado de la frontera lusa, la región del Alentejo se caracteriza por un tipo de colonización del territorio en pequeñas aldeias distribuidas en función de las condiciones para el cultivo agrícola, principal actividad económica de la zona. La estructura de la propiedad ha sido una de las principales causas de esta forma de colonización; las aldeas funcionaron y todavía funcionan como núcleo desde el que reclutar mano de obra para el campo, aunque también han ido modificando su papel y diversificando las actividades que acogen en función de los cambios en las pautas de desarrollo económico de la región, reorientada hacia el turismo y cuyo paisaje se ha visto sustancialmente modificado por la presa de Alqueva.

Esta obra hidrográfica, monumental (la mayor de su género en Europa) y polémica por su impacto ambiental (afecta a 3.500 hectáreas de territorio), ha obligado a reubicar aldeas como las de Luz y Estrela, sumergidas ambas por las aguas una vez construido el embalse. En el cementerio de Estrela, un muro continuo de albañilería delimita los recintos del camposanto y la capilla, construidos en un encinar. Al configurar dichos recintos, uno de los árboles se incorporó al ámbito de la capilla, actuando asimismo como elemento de anclaje del conjunto al paisaje circundante y transformando el patio de entrada a la iglesia en un espacio de sombra. Además de estos cometidos, el gesto de acoger la encina adquiere un significado estructural, tanto en el diálogo que el nuevo cementerio establece con el paisaje, como en la propia caracterización del espacio de culto, en el que se empleó madera de roble procedente de árboles caídos en el entorno de la presa de Alqueva, en el valle del Guadiana.

Tal y como pasó en Aldeia da Luz, cuyo cementerio fue trasladado por la construcción de la presa, los elementos originales se reinterpretan en el nuevo emplazamiento. La intensidad espacial contenida en los vacíos entre los muros o entre las zonas de sombra y las superficies blancas son intervalos de silencio que acentúan el sentido de esta morada última.

[Por voluntad popular de los vecinos de la Aldeia da Estrela, la encina del patio se arrancó de raíz antes de la finalización de la construcción del cementerio]... [+]