El teatro se sitúa en una ladera de las montañas de Yanshan, al norte de China y en el extremo del eje este-oeste que atraviesa Pekín, como un símbolo material del contraste entre el sinuoso paisaje natural y el vasto y abierto escenario urbano propio de la ciudad.

Las ‘penetraciones’ que intervienen en el terreno —realizadas a lo largo del eje para encajar el edificio en el lugar— resuelven de manera simultánea la funcionalidad espacial del teatro y la conexión visual entre ambas direcciones a nivel de escala humana...[+]