Racionalismo o Tendenza
Cuatro hileras en Aljaraque

Racionalismo o Tendenza

Cuatro hileras en Aljaraque


La línea dura, reiterada y blanca, ¿es sureña o racionalista? En la preferencia de los arquitectos andaluces es difícil discernir la influencia del racionalismo, es decir, de la versión VPO del Existenz-minimum, y la del sur soleado y claro, formulada a la manera tipológica de la Tendenza, bastante arraigada en la escuela sevillana.

La primeras series de hileras luminosas del Movimiento Moderno trataban de dar una alternativa al alojamiento masivo, ya fuese alto o bajo, de las ciudades del año veinte. Con frecuencia, como sucedió en Berlín, tal alternativa terminó produciendo una vivienda de línea dura y programática en ciudades-jardín para una clase media de funcionarios y empleados.

En nuestro país, semejante racionalismo urbano se agotó en los primeros años de la década de los sesenta con el peculiar episodio de los Poblados Dirigidos y alguna que otra realización inspirada. Después, la vivienda social siguió una evolución como bloque en altura. La quiebra final de este modelo en tiempos de descentralización y de iniciativa pública replantea el viejo ejercicio de la geometría de hileras en dos plantas. En este caso de Aljaraque, a cuatro kilómetros de Huelva, se hace como reconversión de una ordenanza de bloques de cuatro plantas con poca densidad.

Para los autores, la uniformidad del proyecto expresa un deseo de coherencia frente a un entorno informe. Para los cooperativistas, es un sacrificio aceptable; se trata de profesionales medios y titulados dispuestos a defender la forma ordenada del conjunto que, en todo caso, ofrece pequeños patios y balcones para el cuidado individual aunque no hayan llegado a realizarse las pérgolas, celosías y cerramientos que enriquecían el proyecto original...[+]