Situada en una zona industrial cerca del centro de la ciudad, la nueva planta de tratamiento de residuos se convierte en un modelo ejemplar en el campo de la gestión de residuos y producción de energía, así como en un punto de referencia en el paisaje urbano de Copenhague. Se trata de la mayor iniciativa medioambiental en Dinamarca que sustituye a la obsoleta planta Amagerforbraending adyacente. El nuevo complejo comprende una planta de incineración, una planta de separación y un edificio de administración y servicios que combinan estrategias de sostenibilidad con otras de concienciación como la chimenea, que produce un aro visible de humo por cada tonelada de dióxido de carbono que la planta emite a la atmósfera.

El proyecto refleja una visión innovadora de un nuevo tipo de planta de tratamiento de residuos económica, ambiental y socialmente rentable que se concibe como un destino en sí mismo. En lugar de considerarla como un objeto aislado, se intensifica la relación entre el edificio industrial y la ciudad mediante la ampliación de las actividades de ocio existentes en la zona. Además se genera, a modo de montaña artificial, una plataforma para practicar esquí de 31.000 metros cuadrados con diferentes niveles de dificultad.