Edificio de usos mixtos Solids IJburg, Amserdam
Baumschlager Eberle Architekten- Tipología Comercial / Oficina
- Fecha 2005 - 2011
- Ciudad Ámsterdam
- País Países Bajos
- Fotógrafo Werner Huthmacher Eduard Hueber
El barrio de IJburg es uno de los nuevos desarrollos urbanos que se extienden sobre siete islas artificiales construidas en el sureste del núcleo central de Amsterdam. En la isla de Haveneiland, la más grande de todas, se sitúa el proyecto Solids, un conjunto de siete edificios que señala el acceso al distrito. Inspirado en la solidez de los bloques tradicionales que forman parte de la memoria colectiva de los holandeses —con imponentes columnatas, balcones y revestimientos de piedra—, el edificio está pensado para durar 100 años. Una de las principales estrategias para conseguir este objetivo es separar por completo el contenedor del contenido, ya que de esta forma el edificio puede prolongar su vida útil aunque se agote la función para la que fue construido. Así, la estructura portante, concentrada en la fachada y en los núcleos de servicio, no interfiere en la distribución interior de los espacios y todas las estrategias climáticas están pensadas para adaptarse a los posibles usos, ya sean comerciales o residenciales. El edificio se concibe, por tanto, como un marco que cada inquilino puede llenar de acuerdo a sus necesidades.
La relación entre la superficie construida y la superficie de la parcela alcanza un ratio de 6.4, equivalente al de los núcleos medievales o los rascacielos de metrópolis como Hong Kong. Sin embargo, esta alta densidad no interfiere en la calidad de la iluminación natural y las vistas, gracias a la distribución de la superficie total en cuatro bloques independientes en torno a un patio central. Este espacio responde a un interés pragmático ya que libera las fachadas principales de entradas de servicio o salidas de emergencia pero también cumple una papel simbólico al dotar de identidad comunitaria al conjunto. El patio se concibe, por tanto, como el corazón secreto del proyecto y su diseño se inspira en el claustro de un monasterio con arquerías y superficies de agua.
Desde el punto de vista energético, el proyecto cumple altos estándares a través de estrategias arquitectónicas sencillas como la posición de los volúmenes, la inercia térmica de los muros y forjados o la profundidad de la fachada, a lo que se añade un sistema centralizado de ventilación con recuperación de calor. Pero más allá de su eficiencia climática, el proyecto contribuye a la sostenibilidad mediante la creación de una imagen atemporal que favorece la aceptación pública del edificio a través de la rigurosidad y la elegancia de sus detalles y acabados. Entre ellos, destaca la partición de las losas de piedra que se oculta en las zonas en sombra de la fachada para transmitir una sensación de cuidado y perfección.
Obra Work
Mischnutzung Solids IJburg
Cliente Client
Stadgenoot
Arquitectos Architects
Baumschlager Eberle Architekten
Colaboradores Collaborators
Willem Bruijn, Stefan Beck, Tim Kreidel (jefes de proyecto project architect); Anke Spittel, Christoph von Oefele, Florian Klee (asistentes assistance)
Consultores?Consultants
Karel Martens, Jan van de Pavert (arte art); Smit Westermann (estructura structural engineer); Huisman & van Muijen’s-Hertogenbosch (tecnología building technology); Cauberg Huygen (física de la ingeniería de la construcción building physics)
Contratista Contractor
JP van Eesteren
Superficie construida Built-up area
12,000 m²
Fotos Photos
Werner Huthmacher, Eduard Hueber / archphoto © Baumschlager Eberle Architekten