Inspirado en la rica tradición textil de Filadelfia, Colorscape muestra cómo a partir de un solo material se puede crear una estructura sorprendente con el poder de unir y estimular a la comunidad. Esta instalación, situada en el atrio Perelman del Museo de Arte de Filadelfia, formó parte de la exposición ‘The Architecture of Francis Kéré: Building for Community’, dentro de la serie ‘Creative Africa’.

Colgadas del techo sobre bastidores de acero, las cuerdas de colores se transforman en un volumen masivo, un elemento unitario que envuelve al visitante. La geometría del proyecto se genera, conceptualmente, al superponer el trazado orgánico de los pueblos africanos y la retícula regular de las ciudades americanas. Siguiendo el espíritu de la construcción comunitaria en África rural, los detalles técnicos se han diseñado para que puedan ser ejecutados por gente sin experiencia. Para enlazar las diferentes piezas no son necesarias herramientas ni técnicas específicas por lo que el proceso es seguro e incluso los niños pueden participar. Una colección de pistas de audio grabadas tanto en Burkina Faso como en Filadelfia genera una atmósfera sonora que enriquece y complementa la experiencia visual del conjunto.