Milagrosamente indemne de la industrialización que experimentó la provincia belga de Limburgo desde que en ella se descubriese carbón a principios del siglo XX, Hoge Kempen es un extenso conjunto de bosques y brezales que en 2006 se convirtió en el primer —y de momento único— parque nacional del país, hoy modelo no solo de conservación medioambiental sino de gestión turística, ya que ha sabido generar puestos de trabajo y beneficios sin perjuicio de la biodiversidad.

Como parte de una red ciclista que conecta todo el parque, se ha construido una pasarela que más allá de salvar una carretera constituye una experiencia paisajística en sí misma. Evocando las obsoletas instalaciones mineras de la zona, una estructura de caballetes de madera sostiene un tablero flanqueado en sus arranques por altos paramentos, lo que incita al pedaleo hasta la parte central, donde el camino se allana y el pretil se reduce al mínimo para ofrecer hermosas vistas entre la fronda...[+]