Casa Innauer, Dornbirn
Oskar Leo Kaufmann 

Casa Innauer, Dornbirn

Oskar Leo Kaufmann 


Dentro de los desdibujados límites de la periferia residencial de Dornbirn, una localidad austriaca próxima al lago Constanza, se multiplican las casas con tejados a dos aguas y fachadas salpicadas de pequeños huecos, adaptadas al clima local y con una imagen casi imperturbable a lo largo de años. Alineada con una de las calles en cuesta que domestican este territorio húmedo y quebrado se sitúa una vivienda unifamiliar en la que la forma y el sistema constructivo de la casa alpina tradicional se han reinterpretado para adaptarla a las necesidades espaciales de sus futuros inquilinos. Si bien el volumen reproduce los rasgos más sobresalientes de la casa arquetípica, la supresión de los aleros, el acabado exterior con un mismo material (acero inoxidable) en muros y cubierta, y la desigual distribución de amplios huecos en las fachadas diferencia el edificio de las construcciones vecinas.

La vivienda se desdobla en dos crujías perpendiculares que, arrimadas a los límites del solar, protegen el jardín posterior y separan las funciones menos compatibles. La primera, de orientación este-oeste, está constituida por una pérgola de grandes dimensiones que cobija varios automóviles y por un sótano de planta similar que se destina a usos diversos y previsiblemente más ruidosos (juegos, gimnasio, etc). La segunda, de orientación norte-sur, aloja la vivienda propiamente dicha: cocina y comedor en planta baja, sala de estar y despacho en la planta intermedia, y habitaciones y una banda continua de vestidores en la planta superior, conectadas por una estrecha escalera que discurre entre muros. Las tres caras de esta segunda crujía visibles desde la calle siguen un mismo patrón: un único hueco rompe el desarrollo del paño —cubierto por una precisa modulación de paneles metálicos— para iluminar el comedor y el despacho en los dos testeros, y la cocina, de forma cenital, en la cara principal. La fachada al jardín, por el contrario, muestra sin complejos la vida familiar en siete escenas a través de los ventanales que ocupan toda la superficie entre forjados.

Estructura y cerramiento se unen en los muros de hormigón in situ que configuran además el espacio interior, combinados puntualmente con paneles de madera clara que dan cierta calidez en puntos concretos del hogar, como la sala o el despacho. Al exterior queda el aislamiento térmico —dos capas de lana de roca—, protegido por el acero perforado colocado sin juntas. El sistema de calefacción en invierno y aire acondicionado en verano, alimentado por una bomba de calor, circula por el interior de los forjados de hormigón... [+]


Cliente Client

Siegfried Innauer

Arquitecto Architect

Oskar Leo Kaufmann

Colaborador Collaborator

Albert Rüf

Consultores Consultants

Norbert Gsteu (estructura structure); Installationen Fink (instalaciones mechanical engineering)

Fotos Photos

Adolf Bereuter