La nueva biblioteca del subcentro de Pekín, cuya finalización está prevista para principios de 2024, ofrecerá un espacio contemporáneo y atemporal para el intercambio de conocimientos con el que la firma noruega busca enaltecer la riqueza cultural de China. Con unos imponentes dieciséis metros de altura, la sala principal se define por la armonía entre dos elementos de marcado contraste. Por un lado, el «bosque» de esbeltas columnas que sostiene una cubierta con formas abstractas inspiradas en las hojas del ginkgo. Por otro, la monumental plataforma esculpida en el terreno, que desempeña múltiples funciones y acoge espacios experimentales donde los visitantes pueden leer y aprender.