El hecho de que se haya escrito tanto sobre este auditorio, desde su inauguración hasta la reciente publicación del documentado estudio sobre su construcción (Hans Scharoun: Philharmonie Berlín, 1956-1963, editado por Wilfried Wang), demuestra que las cuestiones que plantea han seguido interesando no sólo a arquitectos, músicos y espectadores, sino también a quienes intervienen en la conformación de las ciudades, lo que explica que hoy se reconozca su interés —y también su influencia desde hace décadas— de forma unánime...