Torre en la bahía de Qianhai, de Sou Fujimoto
El primer paso para los arquitectos fue preguntarse cosas como ¿qué significa una nueva 'torre' en el siglo XXI? y ¿cómo puede evolucionar una torre sin dejar de llamar la atención, como hace la Torre Eiffel?
La respuesta fue este rascacielos formado por 99 torres distintas que están unidas mínimamente a la estructura central. La parte superior de la estructura es plana cuando se ve desde arriba y da la impresión de ser un conjunto de islas flotando en el aire encima de una enorme cascada de agua.
Esta forma tan peculiar, afirman los arquitectos, quiere representar al mismo tiempo una unidad y una colección de distintas partes más pequeñas. Desde lejos se ve como un solo edificio, pero desde dentro se distinguen perfectamente las decenas de islas que lo forman. También pretende simbolizar cómo el mundo se está haciendo cada vez más diverso...
El Confidencial: El rascacielos futurista que quiere convertirse en la nueva Torre Eiffel