Las estructuras y masas de tierra de City, de Michael Heizer, se podrán visitar en Nevada a partir de septiembre.
El reclamo de la nueva temporada artística internacional no es una exposición en un gran museo ni la efemérides de un gran artista —si exceptuamos que en abril de 2023 coinciden en Francia, España y otros países las muestras que celebran el 50º aniversario de la muerte de Picasso—, sino algo que rivaliza con la arquitectura, la experiencia inmersiva y la belleza de las ciudades perdidas. El californiano Michael Heizer (1944), conocido por sus earthworks en los parajes áridos norteamericanos, ha concluido la obra de arte más grande del mundo tras 50 años en construcción. City —abierta al público el 2 de septiembre, con cita previa— se ubica en el desierto de Nevada y es un complejo de estructuras y masas de tierra al aire libre que evocan las ciudades mesoamericanas y egipcias. Tiene una extensión de más de un kilómetro y medio de largo y medio de ancho y ha contado con el apoyo financiero de influyentes coleccionistas, marchantes y directores de museo, como el MoMA o el LACMA (Los Ángeles), aunque aún no se ha hecho público el coste total, que podría superar el de la construcción de dos museos juntos...
El País: La obra de arte más grande del mundo
El Mundo. Un coloso en el desierto: así es la megaescultura más remota del mundo