Cuando la mayoría de noticias que recibimos sobre arquitectura austriaca proceden de la reducida provincia occidental del Vorarlberg y de arquitectos como Baumschlager y Eberle, la aparición de esta monografía nos remite a la producción del denominado ‘corazón verde’ del país, Estiria. La obra de Klaus Kada, que en un principio se encuadró entre la de los integrantes de la denominada ‘Escuela de Graz’, se presenta ahora sin embargo desde una posición distinta. Su arquitectura persigue una imagen que encaja más con la de, en palabras de Moholy- Nagy, ‘moduladora de la luz y el espacio’, que con el expresionismo de Domenig o Szyskowitz y Kowalski.
Tras un primer ensayo de Otto Kapfinger que introduce al lector en éstos y otros aspectos de la personalidad arquitectónica de Kada, se inicia un recorrido por su obra que no se ajusta a un orden estrictamente cronológico, sino más bien a una clasificación tipológica o de usos. Todo ello en una cuidada edición —con elegante portada de Alexander Kada— donde destacan, por cantidad y calidad, las fotografías que complementan los textos y planos descriptivos de cada proyecto.