Entre los cuadernos de autor publicados hasta ahora en la revista especializada Tribuna de la construcción, ninguno tan completo como el número doble dedicado a Francisco Mangado. En 2003, el arquitecto navarro concluía lo que entonces se calificó como su obra más ambiciosa: el Baluarte o Palacio de Congresos y Auditorio de Navarra en Pamplona; sin negar la importancia operativa y simbólica de aquel monumento discreto, tres años más tarde podría decirse que no conocemos aún los límites de las aspiraciones de Mangado, quien ahora tiene entre manos edificios —desde el palacio de congresos y hotel en Palma de Mallorca hasta el Pabellón de España en la Expo Zaragoza 2008, pasando por las oficinas en la Place de l'Europe de París— cuya escala y visibilidad dibujan para su autor un futuro aún más prometedor que su pasado de ‘joven promesa’ y su presente como ‘valor consolidado’ de la arquitectura española. Exhaustivo hasta la extenuación, este volumen extrae todo el partido del formato monográfico. Cada uno de los veintidós proyectos incluidos se despliega ante los ojos del lector de modo que no escape a su consideración ninguno de los rasgos que caracterizan la producción de Mangado. Recomendable y revelador es el texto introductorio escrito por David Cohn; y tampoco conviene dejar de lado el capítulo final, que reivindica el talento del arquitecto como diseñador.
