(1913-1998)
El 12 de mayo murió Fernando Moreno Barberá, autor prolífico entre los que recuperaron el lenguaje de la modernidad en los cincuenta. Había nacido en Ceuta en 1913, y obtuvo el título de arquitecto en 1940. Tras una estancia en el estudio berlinés de Paul Bonatz, trabajó para el Instituto Nacional de Industria, donde coincidió con Julio Cano Lasso; con él realizaría el barrio de San Antonio en Madrid (1955-1957) y las viviendas en el viaducto madrileño (1958-1962), donde también intervinieron Juan Gómez González de la Buelga y Rafael de la Joya. En el marco del INI, participó además en la creación de la red nacional de paradores de turismo, aunque lo más relevante de su producción son sin duda los edificios universitarios, que manifiestan su admiración por el Le Corbusier más monumental y escultórico, y su idea de una arquitectura definida por sus atributos esenciales: las proporciones, la articulación de los espacios, la luz y las calidades materiales. Muestras de ello son las Facultades de Derecho en Valencia (1959-1960) y de Biológicas y Geológicas en Madrid (1965-1966), la Escuela de Agrónomos de Córdoba (1964-1968) o la Universidad Laboral de Cheste (1967-1969).