(1922-1993)

Tras una larga enfermedad falleció en Madrid, el 1 de octubre, una de las figuras más destacadas de la arquitectura española de la segunda mitad de este siglo. El coruñés Ramon Vazquez Molezún estudio en Madrid, donde fijo su residencia y se asoció profesionalmente con Jose Antonio Corrales; juntos construyeron las piezas claves en su trayectoria: el Instituto de Herrera de Pisuerga (1954-1956), la residencia de Miraflores de la Sierra (1957-1958), en colaboración con Alejandro de la Sota, y, sobre todo, el Pabellón de España en la Exposición de Bruselas de 1958, que simbolizo la voluntad de apertura y modernización de un país que estaba saliendo de la autarquía. Durante los setenta, Molezún y Corrales vivieron una etapa profesional muy activa que culminaría con la torre de Bankunión en el Paseo de la Castellana de Madrid. En 1992, el Consejo Superior de Colegios de Arquitectos les concedió la Medalla de Oro de la Arquitectura.