‘Bigness’ era un término poco usado, pero Rem Koolhaas lo ha hecho frecuente a fuerza de repetirlo en sus escritos, y sin duda esta palabra es la que con más colorido describe su pasión pertinaz por la gran escala. Esa fascinación por la Nueva York abigarrada de Delirious, el carácter doctrinal del proyecto para el mega Congrexpo de Euralille o la ambición territorial de su propuesta para el Delta del Río de las Perlas lo designan como el apóstol más ferviente de la talla XL. Según el arquitecto holandés, esa preferencia por lo grande se deriva de un interés genuino por la riqueza programática, por la posibilidad de agrupar usos diversos en un mismo envoltorio...[+]