Situada en la esquina diagonalmente opuesta de la Kontorhaus, la manzana de Friedrichstadt Passagen, limitada por la Mohrenstrasse y la Taubenstrasse y abierta al Gendarmenmarkt, responde a la otra forma de intervención en la zona, consistente en la asignación del desarrollo de toda una manzana a un único arquitecto. En este caso, se trata de un solar en el que no quedan trazas de la antigua edificación, y el encargado de realizar el proyecto ha sido Oswald Mathias Ungers. La investigación sobre la manzana típica berlinesa ha sido el punto de partida de Ungers, quien ha distribuido el programa habitual de la Friedrichstadt (vivienda, comercios, oficinas y aparcamiento) dentro de un gran volumen escalonado y rigurosamente simétrico, perforado por dos patios interiores cuadrados. Las masas de esta gran manzana se reparten formando seis bloques cúbicos que se alzan hasta la planta quinta pegados a las alineaciones de calle, alcanzando la altura normativa de comisa de 22 metros; las separaciones entre estos bloques señalan las entradas a los pasajes comerciales que atraviesan la gran manzana en ambos sentidos y dan acceso al cuerpo interior retranqueado. Este cuerpo se yergue otras tres alturas por encima de la línea de comisa. Como remate, las seis torres correspondientes a los núcleos de comunicación, retranqueadas también, sobresalen por encima de la azotea de este cuerpo interior, completando así el efecto global de escalonamiento…[+]