Martin Filler

Las nuevas e impresionantes oficinas federales de San Francisco no dejan lugar a dudas de que su principal diseñador, Thom Mayne, del estudio Morphosis radicado en Santa Mónica es actualmente el más importante de la generación de arquitectos estadounidenses de sesenta y tantos años, y de que además se le debe incluir dentro de la pequeña comunidad de maestros internacionales contemporáneos entre los que se encuentran Rem Koolhaas, Jacques Herzog, Pierre de Meuron y Jean Nouvel. Los encargos singulares y nada comerciales de Mayne (principalmente para instituciones educativas y gubernamentales) han evitado que se convierta en otra marca cómplice del sistema. Por el contrario, Mayne se ha dedicado a crear edificios sólidos por su seriedad, ambición y orientación social. Su nueva obra maestra, la última de la serie de encargos del gobierno de EEUU, es la más impresionante hasta la fecha. El bloque de oficinas de media altura, situado junto al beauxartiano centro cívico de San Francisco conserva toda la frescura y la fuerza con la que —junto a su antiguo compañero, Michael Rotondi— obtuvo los primeros reconocimientos a principios de los ochenta, y además reafirma a un importante artista que está en su mejor momento. En la historia reciente de los Estados Unidos nunca se ha construido nada tan atrevido patrocinado por el Gobierno Federal... [+]