La nueva biblioteca pública del barrio de Butarque, en el distrito madrileño de Villaverde, responde a una demanda histórica del vecindario, siendo la primera construida por el Ayuntamiento de Madrid en esta zona. Su diseño se fundamenta en la creación de un espacio cálido y acogedor, donde la luz natural es protagonista. Basado en el concepto de ‘mil soles’, el edificio incorpora múltiples elementos como lucernarios, lamas verticales y celosías, que redirigen y filtran la radiación solar para generar una atmósfera luminosa y confortable en el interior.

La edificación se presenta como un volumen prismático de líneas sencillas, revestido con chapa metálica que remite a las antiguas naves industriales del entorno. En su fachada hacia la calle Calcio, se adopta una escala doméstica, con un ventanal que actúa como escaparate urbano. Por el lado de la calle Miguel Solás, la fachada se articula con patios, lucernarios y sistemas de protección solar que enriquecen su expresión arquitectónica.

El proyecto se organiza en dos plantas principales y una entreplanta. La planta baja está dedicada a usos sociales, como actividades colectivas. La planta superior, en cambio, está pensada para el estudio o la lectura, ofreciendo un ambiente de mayor concentración. En la entreplanta, se ubica la zona más silenciosa: el espacio de estudio, elevado y resguardado, que combina la luz, la madera y una excelente acústica.

La estructura combina hormigón en las plantas inferiores —que también actúan como contención del terreno en una parcela con una diferencia de nivel de 4,65 metros— y madera en las plantas superiores. Este material no solo define la estructura, sino que también está presente en ventanas, puertas, paneles, techos y revestimientos, logrando coherencia estética y sostenibilidad. La biblioteca ha obtenido la certificación ambiental VERDE del GBCe, reafirmando su compromiso con la eficiencia energética y el respeto medioambiental.