Ucronía urbana ucraniana
La revista Arquitectura Viva refleja los sucesos actuales y las reacciones a la guerra en Ucrania con un monográfico que va más allá del trascendental impacto en lo estrictamente arquitectónico.
En las guerras como bien se sabe, la primera víctima que sufre esa atrocidad es la vida, para luego dar paso al condicionamiento interesado del empleo de la verdad entre los bandos enfrentados y sus compinches. En Ucrania, como bien han relatado ya los medios, en estos casi dos meses de enfrentamientos con los rusos, su población ha sufrido muerte y un éxodo masivo de las ciudades, por una violencia que hacía décadas no se vivía en Europa.
Esa violencia sufrida, también sacude a las ciudades. Esos lugares materiales que sus habitantes los hacen posibles y que en una guerra se ve, se siente y se experimenta que la falta de sus gentes hace que una ciudad no sirva para nada. Como bien dice el gran experto, arquitecto, editor y profesor Luis Fernández-Galiano, las ciudades ucranias sufren un urbicidio, «mientras los museos ocultan, protegen o trasladan a lugar más seguro sus piezas más valiosas, y mientras la memoria depositada en libros, documentos o legajos se procura mantener fuera del alcance de este vendaval de destrucción, sus sedes arquitectónicas están trágicamente expuestas al impacto de los misiles o las bombas, a la onda expansiva de las explosiones que destruyen carpinterías y cubiertas, y a la consecuencia inevitable de los incendios que arrasan los interiores, traduciendo en cenizas unas lluvias de fuego que devastan también los cuerpos y las almas»...
ABC - Fahrenheit 451: Ucronía urbana ucraniana