Norman Foster

Norman Foster fue el primer galardonado con el Premio BIA, que otorga a instancias de la delegación vizcaína del Colegio de Arquitectos Vasco-Navarro (COAVN) la nueva plataforma Bilbao Bizkaia Architecture, cuyo objetivo es «afrontar los retos de la profesión desde conceptos como la internacionalización, el intercambio o la participación ciudadana». Convocada bajo el lema ‘Urban Regeneration Forum’, la bienal tuvo por objeto la reflexión sobre «cómo hacer mejores las urbes», y premió a Foster por la importancia que ha tenido para la regeneración de la ciudad el Metro de Bilbao, una infraestructura cuya construcción fue una experiencia incomparable para el arquitecto británico, quien en su discurso de aceptación reconoció que ver «las tuneladoras debajo de la tierra» fue algo «casi religioso», un momento en el que se llega a ser «consciente de las fuerzas de la naturaleza». El homenaje a Norman Foster, celebrado en el atrio del Museo Guggenheim, fue el clímax de una constelación de actos organizados en torno a un congreso que, con diferentes argumentos, se celebrará, a partir de su primera edición, cada dos años con el objetivo de convertirse en una referencia para la arquitectura internacional.