Se llega a Cosanti a través de una calle, la Doubletree Ranch Road, que es perpendicular al Boulevard Tatum, una de las zonas más acomodadas de Phoenix. Nada parece indicar lo que se está a punto de visitar, salvo unas cuantas campanas que nos reciben con su cántico pausado generado por una brisa imperceptible. Antes de la entrevista, Jeff Stein, presidente de la Fundación Cosanti, nos recibe y, haciendo de cicerone, nos guía bajo cúpulas de hormigón. En mitad de la visita, nos detenemos, y vemos cómo se vierte bronce fundido en moldes para hacer campanas. Es en este marco, en una pequeña cabaña anexa, donde tiene lugar la entrevista con Paolo Soleri una mañana de junio, apenas un año antes de que el arquitecto visionario falleciese a los 93 años...