En el Bois de la Bâtie, un frondoso parque público de Ginebra, los arquitectos de Group 8, junto con la ingeniería Guscetti y Tournier, han construido un aviario cuya estructura se asimila a los troncos de los árboles. Las medidas contra la expansión de la gripe aviar requerían una zona de cuarentena para las anátidas migratorias, a la que se añadió un aviario para especies nativas en peligro de extinción. La instalación se integra en el entorno con una cubierta plana de hormigón de planta sinuosa y una estructura a base de pilares ramificados pintados en tonos que van del blanco al gris pasando por el verde.