
El 21 de febrero de 1988, Cornelis Van Eesteren falleció en su casa de Ámsterdam. Estoy desolada. No solo porque mis ávidas preguntas ya no encontrarán respuesta, sino también porque aquellos encuentros llegaron a conmoverme. La participación de Cornelis van Eesteren en cuestiones actuales sobre enseñanza y práctica del urbanismo estaba, al igual que sus realizaciones, libre de toda retórica y plena de compromiso personal...[+]