Con motivo de los 150 años de la universidad ETH de Zúrich, el profesor Andrea Deplazes puso en marcha, como parte del programa docente, el estudio Monterosa. El objetivo era desarrollar y ejecutar, junto a treinta estudiantes, un refugio de montaña en medio de dos glaciares en los Alpes. El proyecto exigió la utilización de la más alta tecnología para el diseño de piezas prefabricadas, que fueron transportadas por helicóptero y ensambladas in situ en un plazo de cinco meses, dadas las temperaturas extremas del lugar. El edificio, energéticamente autosuficiente (véase AV Monografías 140), se ha construido con muros de madera portante en su interior y acabado de chapa de aluminio.