Obra de la firma mexicana Manuel Cervantes Estudio, esta casa busca optimizar la iluminación y la relación con el exterior. Envuelta por una piel cerámica, la composición de volúmenes apilados se adapta a la inclinación del terreno, diluyendo los límites entre interior y exterior. El acceso principal se realiza por un cuerpo casi ciego con entrada a la planta baja, respetando los diferentes niveles del terreno. El programa está compuesto por tres cuerpos en el piso inferior, que alberga las zonas comunes, la cocina y un estudio. El nivel superior contiene las habitaciones conectadas mediante un pasillo.