Villerupt es un pequeño municipio del valle de Alzette, en la región francesa de Lorena, situado junto a la frontera con Luxemburgo. La historia de esta localidad está vinculada a la explotación del hierro, en cuya extracción trabajaron muchos italianos. Casi todas las instalaciones industriales han sido desmanteladas, pero el paisaje conserva muchos vestigios de este periodo. Este centro cultural emerge a los pies de uno de los muros pétreos de contención que sostenía una plataforma técnica sobre la cual se descargaba el mineral extraído antes de ser transportado.

En homenaje a las raíces italianas de gran número de habitantes de Villerupt, el proyecto se inspira en la arquitectura del Coliseo de Roma y de la Casa Malaparte en la isla de Capri, icono racionalista en el que Jean-Luc Godard rodó en 1963 El desprecio (Le Mépris), protagonizada por Brigitte Bardot y Michel Piccoli. El espacio cultural híbrido alberga actividades vinculadas a múltiples prácticas artísticas, incluidas digitales, así como un cine con capacidad para 147 espectadores, un auditorio que puede acoger hasta 1.140 personas y un restaurante. La construcción se abre con arcos a la explanada Nino Rota. En el interior bañado por luz natural se busca la atemporalidad a través de un lenguaje arquitectónico que utiliza elementos sencillos.