Ampliación de la bodega Château Margaux en Burdeos
Norman Foster- Tipo Bodega Industria Rehabilitación
- Fecha 2015
- Ciudad Burdeos
- País Francia
- Fotógrafo Nigel Young
Situado en la región francesa del Médoc, Château Margaux es uno de los productores de vino más importantes del mundo y cuenta con la prestigiosa categoría Premier Cru según la clasificación oficial del vino de Burdeos de 1855, todavía vigente. Desde que fue construida en el siglo XIX, la finca ha evolucionado para adaptarse a los cambios del proceso vinícola, hasta que en los últimos años los rápidos avances técnicos hicieron necesaria una renovación. El proyecto incluye el diseño de un nuevo edificio —el primero visible desde 1815—, que proporciona a la bodega la flexibilidad y las instalaciones precisas para continuar su rigurosa búsqueda de la excelencia.
La finca original se planeó como un pueblo agrícola, con el castillo como centro rodeado de los servicios necesarios para la elaboración del vino. El nuevo volumen, destinado principalmente a variedades de uva blanca, se extiende a partir del ala este siguiendo la línea de cornisa de los volúmenes existentes, de manera que se equilibra la composición del conjunto. El objetivo principal fue crear un amplio espacio abierto, protegido por una gran cubierta, para albergar las cintas transportadoras usadas en el breve periodo de la vendimia. Durante el resto del año, este espacio sirve para celebrar eventos, además de convertirse en un nuevo vestíbulo de entrada. El resto de la cubierta alberga las instalaciones, espacios de oficina y un centro de investigación y desarrollo. En su simplicidad, el nuevo edificio reinterpreta la lógica de las instalaciones industriales, fortaleciendo la relación entre el proceso de producción y la arquitectura. Un tejado a dos aguas, cubierto con tejas envejecidas, camufla entre las construcciones tradicionales una estructura contemporánea, formada por pilares de acero, con forma de árbol, que sostienen una trama diagonal perforada en la vertiente este por lucernarios. De esta forma, el edificio hace frente al doble reto de cumplir los requisitos técnicos más exigentes y respetar el conjunto tradicional existente.
El resto de las edificaciones de la bodega se restauran siguiendo su carácter original. Una nueva vinoteca subterránea de setenta metros de longitud, situada lejos del área de inundación, proporciona un almacenamiento seguro y ambientalmente estable en el centro de la finca. Esta nueva instalación está conectada con el actual comedor, que se convierte en un nuevo centro de visitantes y es tanto el punto de partida como el final del recorrido de los invitados. La histórica Orangerie, la estructura más antigua de la finca donde se protegían los naranjos del frío, también ha sido rehabilitada.