Inspirado en la arquitectura vernácula del norte de Tailandia, el proyecto consiste en una sencilla y tranquila cabaña para viajeros, y está concebido como una simple estructura de madera cerrada por tres de sus lados, para una mayor privacidad, y abierta solo por uno a la vegetación circundante.

El propietario acordó con el equipo de diseño utilizar la madera como material principal, haciendo referencia a su profesión —se trata de un proveedor y fabricante de muebles de Chiang Mai—, lo que permitía disponer de madera usada procedente de la ciudad para la construcción. La estructura de acero, por su parte, evoca el sistema estructural de las casas de madera tradicionales de la zona.

Llevado a cabo junto a constructores locales, el proceso comienza con la clasificación y lijado de la superficie de las piezas de madera usada, para reutilizarla de nuevo quemando cada tablón según la técnica japonesa del Shou Sugi Ban, que consiste en carbonizar unos tres o cuatro milímetros de espesor de la superficie de la madera en una de sus caras frenando la combustión con agua. Una vez enfriada se cepilla y se limpia, y se le aplican aceites naturales para protegerla. El uso de esta técnica permite además unificar y fusionar maderas usadas en diferentes estados y de distintas procedencias...