Dos libros sobre la vivienda de Madrid: una extensa enciclopedia de cien años de ejemplos que ofrece la ciudad más generosamente dotada de alojamiento social del país; y un manual de últimos proyectos con los que el desarrollo inmobiliario acelerado de la capital intenta ponerse al día.
El gran esfuerzo llevado a cabo por Carlos Sambricio como editor nos deja, por fin, un amplio catálogo comentado de los proyectos y las obras en las que cristalizaron sucesivas formas de la modernidad española, de las que Madrid es el museo más completo. Pero la amplitud del catálogo es también su punto débil para una lectura interesada: en su conjunto, la vivienda social madrileña no es muy apasionante, y el formato editorial elegido hace que los momentos más lúcidos y las arquitecturas más significativas se envuelvan en el caudal de descripciones gráficas y el río de textos de este doble tomo.
Ciertamente la vivienda social es uno de los más fuertes anhelos del cambio social que llamamos Movimiento Moderno, y la vivienda española representa un capítulo tardío y periférico de aquélla. Pero hubo momentos de pasión compartida y de casi tocar la utopía social de los modernos.
Si no se quiere permanecer en lo académico, la cuestión es mirar ese siglo recién pasado desde nuestro tiempo. Entonces, esa semimodernidad madrileña, crisol de la española, ofrece otras posibilidades que siguen esperando una lectura inteligente. La escasa comprensión de la modernidad que está en el fondo de la experiencia de los arquitectos del siglo XX, a veces tan rica, ¿no es algo permanente? Las propuestas tardías de los ochenta, ¿no están lastradas de una falta de crítica y de un afán de estilo semejante al de sus predecesoras? La pobreza de los nuevos y actuales barrios de Madrid, aparte de la estereotipada diatriba sobre la especulación del suelo, ¿no revela una profunda incomprensión del contenido de la arquitectura y el urbanismo como experiencia vital? La administración y los arquitectos parecen haberse contentado con estirar un sistema de producción de proyectos bastante trasnochado.
El librito MHM (Metropolitan Housing: Madrid [15 proyectos de vivienda de la EMV]es un indicador excelente de estas dudas sobre nuestra capacidad de mirar hacia atrás con provecho. La mezcla idiomática ya revela que se trata de seguir el juego, pero incorporando jugadores del star system. Por eso no extraña la pasión por el estilo, por alcanzar una nueva imagen de actualidad. Huida hacia delante, diría probablemente Sloterdijk. Hacerse preguntas gratis, como una estética de la búsqueda. Un excelente trabajo sobre la abstracción y la geometría del bloque, sobre el skyline y la imagen técnica. Pero sin que la construcción quiera experimentar mejores modos sino cosas diferentes, y sin que el pensamiento técnico o el significado de la abstracción apunten a un futuro conmovedor.
