Libros 

Lo ordinario y lo extraordinario

Adela García-Herrera 
31/10/2000


La comparación puede resultar útil: Périphériques es la versión francesa de Actar pero con un aire ‘mayo del 68’ o, en otras palabras, más aparentemente comprometido. Por lo demás, son más las cosas que unen a galos y catalanes que las que los separan: como dice Koolhaas, hay que aceptar las cosas como son y puesto que los encargos no vienen así como así, es preciso inventarlos.

Fundado en 1996 e integrado por Louis Paillard (1960) y Anne-Françoise Jumeau (1962), Emmanuelle Marin-Trottin (1967) y David Trottin (1965), además de Dominique Jakob (1965) y Bredan MacFarlane (1961), que ya han abandonado el grupo, Périphériques es una asociación no lucrativa para la promoción de la arquitectura, que organizó la convocatoria ‘36modelles pour une maison’(véase Arquitectura Viva 60), ha construido el encantador y multicolor Café Musiques en Savigny le Temple, y participó sin éxito y junto a MVRDV en el concurso del Museo de las Artes Primeras en París, que ganó Nouvel. 

Editada en colaboración con la poderosa maquinaria editorial de Birkhäuser, In-Ex es una revista anual que dedica su primer número a lo ordinario y a lo extraordinario, cuyo genuino interés radica en su condición de cajón de sastre [incluye un panorama australiano de lo cotidiano y 17 entrevistas con, entre otros, Herzog y de Meuron, Francis Soler o Neutelings y Riedijk]. Por su parte, Minnesota reúne la producción de Périphériques, tan escasa como entusiasta, definitivamente investida ya con el halo de lo singular. 


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