Una clara sensibilidad medioambiental y la preocupación por los problemas reales a los que tiene que enfrentarse el arquitecto —como los derivados de unos métodos de construcción obsoletos basados en procedimientos manuales o la falta de mano de obra cualificada—, han llevado a este joven equipo barcelonés a plantear la necesidad de industrializar los procesos constructivos y de adaptar sistemas procedentes de otros sectores como medio para mejorar la calidad disminuyendo costes, generar un sistema productivo más eficiente y ahorrar energía a través del reciclaje. Con un cuidado diseño y en edición bilingüe español-inglés, el libro presenta una veintena de obras y proyectos agrupados en torno a tres temas —industria, atmósferas y territorios— que han dirigido el trabajo del estudio desde su fundación en 1986. El gran patio-atrio central generador de microclima en las viviendas Pau Claris de Barcelona, la estructura de módulos tridimensionales y losas alveolares que permitió construir en cinco meses la escuela infantil de Terrassa, o la cubierta bioclimática del Call Center de Toledo, muestran una manera comprometida y optimista de entender la arquitectura, y una alternativa para hacer frente a la problemática realidad que se avecina.