Concebido como un cuerpo flotante y preciso que dialoga con la estética singular del entorno, el nuevo edificio construido en Nueva York por Rafael Moneo en colaboración con el Moneo Brock Studio, alberga las nuevas dotaciones —biblioteca, laboratorios y auditorios— con que la Universidad de Columbia pretende renovar su añejo campus. Al exterior, una piel enfática, cuya protagonista es la estructura, envuelve el programa.