Fundado en 1897, el Museo Parrish acaba de estrenar sus nuevos espacios expositivos en Water Mill (Nueva York) según el proyecto de Herzog & de Meuron. El nuevo edificio (izquierda) evoca la arquitectura tradicional de la zona con dos naves paralelas unidas por un pasillo de comunicación. Las vigas de madera que sustentan las cubiertas de metal a dos aguas conectan visualmente el exterior con las galerías interiores, que albergarán la colección permanente de artistas americanos del siglo XX —de Jackson Pollock a Dan Flavin—, así como la exposición inaugural ‘Malcolm Morley: On Paper’.