La calle Sveavägen es la arteria principal que conecta la ciudad de Estocolmo con el norte. Al final de la calle, en un cruce de caminos, se ha diseñado un bloque exento sobre una parcela definida por un contexto urbano en el que conviven realidades urbanas muy diversas: la gran escala y el tráfico de la calle principal al este y al norte, una tranquila vía residencial al sur, y al oeste un callejón, resultado de la intervención, más íntimo y protegido situado entre el nuevo edificio y el bloque de oficinas existente.

La geometría curvada de la planta persigue liberar superficie y generar espacios públicos adicionales en torno al cruce de Sveavägen y también alrededor del acceso de la pasarela peatonal que conecta el solar con el norte. En altura, las dos últimas plantas se retranquean siguiendo el esquema volumétrico de los edificios aledaños. Tanto los materiales empleados para el revestimiento (distintas piezas de ladrillo rojizo) como la disposición y ritmo de los huecos arqueados están inspirados en ejemplos del patrimonio arquitectónico de la capital sueca. A nivel de la calle, la escala de los arcos aumenta y permite una estructura flexible para los accesos, escaparates y entrada a un aparcamiento subterráneo para bicicletas...[+]