Fruto de la colaboración entre la Universidad de Parma y la Fondazione Accademia dei Giorni Straordinari, este centro educativo en Parma está caracterizado por su compromiso con la inclusión. Con 2.450 metros cuadrados construidos, el centro consta de dos edificios idénticos, separados físicamente por un corte de 12 cm. Uno de ellos está destinado a la educación infantil para los niños de hasta 6 años, hijos de los empleados y estudiantes de la Universidad. El otro se dedica a fomentar la inclusión cultural y social de niños vulnerables de entre 10 a 14 años.

Enclavado en el entorno del parque universitario del sur de Parma, en una zona adyacente al arroyo Cinghio, la construcción de una altura está rodeada por un pórtico perimetral de soportes esbeltos y ligeramente inclinados. El edificio ha sido levantado íntegramente con sistemas de construcción en seco, con una estructura portante de madera laminada y paneles CLT para los forjados.

La forma rectangular del pabellón se consigue yuxtaponiendo dos estructuras perfectamente cuadradas. A modo de un rompecabezas, la composición de los espacios en planta es geométrica, utilizando dobles simetrías, donde las figuras encajan unas en otras. Cada pieza presenta más de tres puntos de apertura diferentes, lo que permite optimizar la luz natural, las vistas y las relaciones de uso en múltiples direcciones. Las conexiones pretenden definir un uso fluido y flexible, donde el equilibrio entre partes opacas y transparentes, paredes y puertas permite experimentar el espacio como una entidad total.