1922-2018
A una edad casi patriarcal que daba cuenta de su mito como intelectual en Latinoamérica, los 96 años, el 26 de noviembre falleció en Milán —poco después de que lo hiciera su esposa Inge Feltrinelli— Tomás Maldonado, artista, diseñador y filósofo de la técnica. Nacido en Buenos Aires en 1922, Maldonado se formó en la Escuela Nacional de Bellas Artes entre 1936 y 1942, periodo tras el cual se afianzó en un compromiso con las vanguardias que le llevaría a fundar en 1945 la Asociación Arte Concreto-Invención, semilla de una de las primeras corrientes de la abstracción latinoamericana: el llamado ‘arte concreto’. Disuelta la asociación, Maldonado fundó la editorial Nueva Visión, se interesó por los medios de la comunicación y abogó por la profesionalización del diseño. En 1954 pasó a Europa y Estados Unidos: estuvo primero en la Escuela Superior de Diseño de Ulm; después en la Universidad de Princeton; y finalmente en Milán, donde promovió la creación de la carrera de Diseño y dirigió la revista Casabella, al mismo tiempo que publicaba una larguísima nómina de textos sobre diseño, arte y arquitectura. Cumplidos los ochenta, retomó la pintura, actividad que consideró, en sus propias palabras, como «una revancha».