Otorgado en sus tres últimas ediciones a Lluís Clotet, Carlos Ferrater y Oriol Bohigas, el Premio Nacional de Arquitectura ha recaído este año en Juan Navarro Baldeweg. Nacido en 1939, el arquitecto, artista y catedrático santanderino ha desarrollado una amplia carrera desplegada en torno a temas recurrentes como la gravedad, la luz o el cuerpo humano, y traducida tanto en pinturas e instalaciones como en edificios de renombre internacional, desde la Casa de la Lluvia en Santander hasta la Biblioteca Hertziana en Roma, pasando por el Palacio de Congresos de Salamanca o el Museo de Altamira. La concesión del premio se produce cuando todavía puede visitarse la gran muestra que el Museo ICO dedica en Madrid a la obra del polifacético artista (véase Arquitectura Viva 168).