La agencia espacial de EE UU recibe las últimas imágenes de la nave antes de que se estrellase para intentar cambiar su trayectoria.
“¡Tenemos impacto!”. Los responsables de la misión espacial DART, financiada por la NASA, han recibido este martes con júbilo la pérdida de la señal emitida por la sonda. La nave, del tamaño de una nevera, ha logrado su objetivo de chocar de frente y a más de 20.000 kilómetros por hora contra el asteroide Dimorfo para intentar desviar su trayectoria. Esta es la primera misión espacial cuyo objetivo es proteger a la Tierra de asteroides, un ensayo general para evitar futuros impactos que podrían borrar del mapa una ciudad entera.
“El éxito de DART nos aporta una nueva herramienta para proteger la Tierra de un impacto devastador de un asteroide”, ha celebrado Lindley Johnson, responsable de Defensa Planetaria de la NASA. “Esta [misión] demuestra que ya no somos impotentes ante estos desastres naturales”, ha añadido este astrónomo y teniente coronel de la Fuerza Aérea de EE UU retirado...
El País: La sonda DART choca contra el asteroide Dimorfo para desviarlo
El País: La sonda DART consiguió desviar un asteroide por primera vez en la historia
El Cultural. Duelo en el espacio: DART contra Dimorphos