La obra de Paulo Mendes da Rocha (Vitória, Espírito Santo, 1928) representa una posición límite, modélica por su coherencia. Titulado como arquitecto en 1954 en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Mackenzie en São Paulo, su obra se enraíza en la confianza en las posibilidades de la técnica y en la precisión de la ingeniería; así define espacios básicos, conformados por la contundencia de la propia estructura, pensados para construir lugares democráticos y de interacción, con el objetivo de contribuir a una ciudad más humana. En su arquitectura, tan estructural y esencialista, anunciada con toda su contundencia en el Gimnasio del Clube Atlético Paulistano en São Paulo (1957-1961) hay, sin embargo, toda una evolución: la incorporación de la experiencia humana y el conocimiento técnico que se va aprendiendo y desarrollando con el tiempo... [+]