Ben van Berkel y Caroline Bos han hecho coincidir la terminación de la casa Moebius (véase Arquitectura Viva 65) con la presentación de una renovada imagen de su firma —rebautizada United Network Studio Van Berkel & Bos—, a través de un libro titulado MOVE, que sigue el modelo de la monografía-manifiesto del SMLXL de Koolhaas y del FARMAX de MVRDV. Encuadernado en una caja de tres tomos satinados, MOVE es un antídoto contra el desencanto que suscita en muchos el estado de la profesión, acerca de la cual Van Berkel y Bos piensan que tiene un gran porvenir si el arquitecto es capaz de acomodarse al signo de los tiempos y poner en evidencia las relaciones de la arquitectura con otros dominios. Reinventarse exige un gran esfuerzo, pero exime de otra carga igualmente pesada: «Liberado del valor subjetivo del ‘talento’, la misión del arquitecto es coordinar...». Y las palabras clave son intersección, hibridación y, sobre todo, inclusión. La idea del proyecto arquitectónico como un acto de inclusión permite integrar construcción, circulación y programa, absorbiendo la fragmentación y la diferencia en una aproximación continua.
